Medicina regenerativa
La medicina regenerativa tiene como objetivo amplificar la respuesta reparadora de nuestro cuerpo, potenciando los mecanismos naturales que tenemos todos. Con esto, se busca no sólo acelerar la recuperación de los tejidos dañados, sino también conseguir una reparación de “mejor calidad”. Su combinación con tratamientos quiroprácticos, quiromasaje, drenaje linfático, etc, tiene un efecto sinérgico, muy beneficioso para nuestra salud articular.
Es muy importante una correcta selección y administración de estos tratamientos, dado que en ello reside el éxito de los resultados. A continuación, te explicaremos las diferencias entre PRP, células madre y ácido hialurónico y para qué se utilizan.
Infiltración de PRP o plasma rico en plaquetas
Las plaquetas son componentes de células sanguíneas que forman parte del proceso normal de la coagulación. Además, contienen sustancias encargadas de promover la reparación de los tejidos, lo que resulta algo lógico después de activarse la coagulación por el motivo que sea (por ejemplo una herida o una hemorragia por un traumatismo). Esta propiedad de las plaquetas se debe a la existencia en su interior de unas vesículas (o gránulos) que contienen proteínas capaces con “efecto llamada” de las células madre pluripotenciales, las cuales son responsables de la regeneración del tejido dañado.
Mediante una técnica especial para la que extraemos una pequeña cantidad de sangre del propio paciente se selecciona la parte que contiene las plaquetas para aprovechar su cualidad de poder reclutar células madre. Esta parte de la sangre se llama plasma rico en plaquetas o PRP. Una vez seleccionado el PRP, se aplica al tejido dañado mediante una infiltración, lo que significa depositarlo directamente donde está la lesión con el uso de una aguja fina.
Normalmente se requieren 3 sesiones de infiltración de PRP para tratar un tejido dañado. La duración del efecto es variable según el grado de lesión, pero en muchos casos el alivio de los síntomas puede ser permanente. Esta técnica es especialmente beneficiosa en el tratamiento de:
Condromalacia o condropatía rotuliana.
Epicondilitis o codo de tenista.
Tendinosis o tendinopatía del tendón de Aquiles (típico de deportes que implican salto o de corredores).
Tendinosis o tendinopatía rotuliana (rodilla del saltador o del bailarín).
Roturas miofibrilares (microrroturas musculares).
Infiltración de células madre
Las células madre se pueden obtener de nuestro propio cuerpo y utilizar como el mejor medicamento regenerativo que existe. Éstas se encuentran en multitud de tejidos, pero especialmente en el tejido graso (por ejemplo la grasa abdominal, flancos o en región de la cadera) y en la médula ósea (cresta ilíaca). El procedimiento precisa una sala de especial acondicionamiento para poder llevarlo a cabo con efectividad y seguridad. Mediante una lipoextracción no estética (similar a una liposucción) se obtiene la grasa necesaria para procesarla y poder seleccionar de ella directamente las células madre, infiltrándolas posteriormente de forma directa en el tejido a tratar. En el caso de la médula ósea, la extracción es más rápida y sencilla mediante una incisión milimétrica en el hueso de la cintura.
El efecto de las células madre es más potente que el del PRP y se utiliza con éxito para articulaciones de carga dañadas ya por la artrosis (desgaste articular), además de complementar el tratamiento de las patologías de los tendones y ligamentos. De una forma coloquial, diríamos que las células madre son el Ferrari de la medicina regenerativa, mientras que los PRP podrían ser un Mercedes.
¿Dónde puedo hacerme estas técnicas?
El Dr. Enrique Sandoval tiene su consulta en la calle Nuñez de Balboa 107 (3ª planta, despacho 301). En esta consulta hará una valoración integral de la patología a tratar y la indicación de tratamiento concreto en cada caso. La infiltración con ácido hialurónico no precisa de ninguna preparación y se puede administrar el mismo día de la consulta. Sin embargo, las sesiones de tratamiento con PRP o células madre requieren una programación especial. El doctor revisará la situación basal de cada paciente antes de programar las infiltraciones, para lo que es imprescindible que la semana anterior no se tome ningún antiinflamatorio (ibuprofeno, nolotil, etc). Para reservar una cita y valorar tu caso, haz clic aquí: